¿Puedo entrar a los EE. UU. por casarme con un ciudadano estadounidense?
12/02/2024
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Artículo de Scott D. Pollock & Associates, P.C. staff
12/02/2024
Para algunos, el camino hacia la ciudadanía estadounidense es casarse con un ciudadano estadounidense. La visa K-1 es una visa de no inmigrante para quienes vienen a los Estados Unidos para casarse. Exploremos más sobre la visa K-1, lo que implica, los pasos para obtenerla y cómo lograr la residencia permanente en los Estados Unidos con una tarjeta de residente permanente.
La visa K-1, también conocida como visa de prometido(a), es una visa de no inmigrante que permite a un extranjero que está comprometido(a) con un ciudadano estadounidense entrar en EE.UU. para casarse con su patrocinador ciudadano estadounidense en los noventa días siguientes a su llegada.
En términos generales, un prometido(a) es una persona comprometida para casarse con otra persona. Un prometido es un hombre comprometido para casarse, y una prometida es una mujer comprometida para casarse. Según la ley de inmigración de los Estados Unidos, un prometido(a) extranjero(a) es el beneficiario de un Formulario I-129, Petición de Prometido o Prometida Extranjero(a), aprobado, al que se le ha expedido una visa K-1 de no inmigrante para viajar a los Estados Unidos para casarse con su patrocinador.
Una visa K-1 requiere que tanto el ciudadano estadounidense como el ciudadano extranjero sean legalmente libres de casarse. Además, deben haberse conocido en persona dentro de los últimos dos años, aunque existen excepciones a este requisito. Por ejemplo, si la reunión supone una dificultad extrema para el ciudadano estadounidense o viola costumbres históricas o culturales.
Hay cuatro pasos importantes para obtener una visa K-1. Cada paso requiere una documentación cuidadosa y puntual.
El proceso de solicitud de la visa K-1 comienza cuando el ciudadano estadounidense presenta el formulario I-129F ante el USCIS. Este formulario tiene como objetivo demostrar que la relación con su prometido(a) es legítima y genuina. El formulario I-129F consta de siete partes.
Una vez que el USCIS aprueba el formulario I-129F, éste se envía al Centro Nacional de Visas (NVC, por sus siglas en inglés). El NVC asigna un número de caso y envía su petición a la Embajada o Consulado de los Estados Unidos donde vive su prometido (a).
A continuación, el prometido(a) no ciudadano debe completar el Formulario DS-160. El Departamento de Estado de EE. UU. utiliza esta aplicación en línea para recopilar información sobre los solicitantes de visa. Asegúrese de imprimir copias para llevar a la entrevista para la visa.
El prometido(a) extranjero se reúne con un oficial consular en la embajada o consulado de los Estados Unidos en su país de origen. El solicitante de la visa debe estar preparado para responder a las preguntas y proporcionar los documentos requeridos. Si el oficial está satisfecho con las respuestas y la documentación, se emitirá una visa K-1.
Si su prometido(a) recibe una visa de no inmigrante K-1, debe reservar su vuelo a los Estados Unidos de inmediato. La visa K-1 es válida por seis meses, por lo que deberán viajar dentro de ese tiempo. Una vez que el prometido(a) ingresa a los Estados Unidos, la pareja debe casarse dentro de los 90 días. Si no lo hace, se exigirá al extranjero que abandone el país.
El cónyuge extranjero ahora puede solicitar la residencia permanente, también conocida como tarjeta de residente permanente, presentando un ajuste de estatus con el formulario I-485. Tenga en cuenta que los hijos solteros menores de veintiún años de un titular de una visa K-1 pueden ser elegibles para una visa K-2.
El proceso de visa K-1 permite a las parejas internacionales unirse en los Estados Unidos. Aunque el proceso para obtener una visa de prometido(a) K-1 implica múltiples pasos y una documentación cuidadosa, puede conducir al matrimonio y la residencia permanente. Los solicitantes deben estar preparados para un proceso exhaustivo, que incluye entrevistas y plazos estrictos. Con un asesor legal experto, el proceso de visa K-1 puede ser el primer paso para construir una vida juntos en los Estados Unidos.